Él

Él, es mi mejor amigo, la persona en quien más confió y a quien le cuento básicamente todo de mi vida. Es quien siempre me escucha o mejor, me lee, ya que solo nos vemos 3-4 veces al año y hablamos todos los días, bueno, yo le hablo todos los días.

Cualquiera que lea esto pensara que me gusta o estoy enamorada de él y no. Cuando nos conocimos me llamo la atención porque era, es, odioso, extremadamente honesto, inteligente, casi siempre dice lo que piensa sin importar las susceptibilidades o a quien pueda herir, gracioso y muchas otras cualidades, pero hoy en día lo veo como un muy buen amigo, mi mejor amigo. Nuestra amistad básicamente se basa en humor inapropiado, mucho sarcasmo, burlas constantes sobre el otro. Es mi filtro mental a la hora de publicar algo ya que me lo imagino burlándose de mí y guardando ese momento, comentario o imagen, para futuras conversaciones. Si me llamase a media noche, algo que es bastante improbable, pidiendome algo seguramente correría o haría lo posible para ayudarlo.

No tengo mucho que decir al respecto o quizá no sé cómo transmitirlo al papel; ya que él, nuestra amistad, es tantas cosas y a la vez. Quienes me conozcan bien sabrán que significa él para mí y entenderán un poco mejor este escrito; no es un amigo cualquiera, es casi como un hermano o quizá algo mucho mejor.